Sentimiento Provincial - Por Leandro F. Chique Canache

“Antes sólo le cortaban la luz a los pendejos” dijo nuestro presidente hace pocos días en una rueda de prensa donde anunciaba el racionamiento de luz en el país, por una sequía que de verdad es innegable, pero que también tiene mucho de mala planificación por parte del gobierno central que no tomó las medidas necesarias en más de 10 años de gobierno para poder buscar paliativos a este problema, más que los típicos paños calientes a los que ya nos tiene acostumbrados, y sistemas paralelos de generación compartida para “prepararnos para la lucha contra el imperio”. El resultado de ineptitud, mala gerencia, ineficacia e ineficiencia, que son consecuencia de una política nacional ya desgastada y que no crea el mayor número de felicidad para nuestro pueblo cómo decía nuestro libertador Simón Bolivar.

A pesar de la mala planificación para buscar soluciones y de lograr los planes necesarios para caer en esta situación con el sistema eléctrico, mientras se regalaba dinero a otros países, por pura política, entiendo y creo que la mayoría entendimos que la sequía es una realidad prácticamente innegable y que es un problema nacional.

Pero este problema del sistema eléctrico nacional, es un problema nacional, que quiere decir que es de todos los venezolanos que vivimos en la tierra de Bolívar. No es un problema nada más de la provincia y no es un problema nada mas de los estados que vivimos fuera de la “Gran Caracas”. Esto es un problema de la nación y por lo tanto los sacrificios que tenemos que hacer todos por la mal llamada revolución deberían de ser equitativos.

Aunque claro, recordemos que los sacrificios por la revolución los hace el pueblo, porque los que están con el gobierno compran bancos y viven como reyes. Los que están con el gobierno no tienen problemas para adquirir dólares sino que viajan en aviones de PDVSA con maletas de dólares. Los que están con el gobierno tienen derecho al trabajo por el simple hecho de no aparecer en la lista de Tascón. Los que están en el gobierno tienen derecho a contratos con el gobierno multi-millonarios que no ejecutan, tienen derecho a seguros privados, escoltas y un sin número de beneficios que ya hacen que a la boliburguesia se la caiga la careta. La careta que tenían de empresarios supuestamente por Venezuela, que no son más que parásitos de un proyecto político desgastado y con muy mala planificación, al punto de hacer cambios de ministros a cada momento y de tener la burocracia más grande vista en Venezuela.

Hoy el presidente nos dio una muestra más de que los que nos tenemos que sacrificar por la revolución no son los boliburgueses que viven en Caracas en sus mansiones de lujo, con carros, dólares, aviones y hasta aras de caballos multi-millonarias. Hoy nuestro presidente condena a todas las personas que vivimos en el interior a pagar las consecuencias de una sequía y de la mala planificación que afecta al sistema eléctrico para que el presidente no escuche las cacerolas desde su mansión presidencial que es Miraflores.

La verdad es que nos tenemos que sentir insultados, si este es un problema nacional, significa que es un problema de todos. No puede ser que él y los que están a su alrededor nos sigan diciendo en nuestras caras que los que tienen los derechos son una minoría, sí en este caso Caracas es minoría y que nosotros tenemos que pagar por lo que han hecho ellos.

Compatriotas nos ven las caras de tontos y no encuentro maneras de demostrar mi indignación por este hecho. Espero que compartan mi sentimiento y encuentren la manera de aunque sea sonar una cacerola para sacar todo lo que tenemos por dentro. No me importa para donde vaya el caballo, quiero que se deje de improvisar y que se pare el circo que tienen en el gobierno, para que haya seriedad, eficacia y eficiencia. Sencillamente la “revolución” se está desgastando a pasos agigantados.

lchique@hotmail.com