Comenzó la campaña por parte del Presidente y nosotros debemos activarnos
La criminalización de la protesta es una demostración del talante poco democrático de este Gobierno, los espacios para la denuncia cada día se cierran más, las represalias en contra de aquellos que elevan su voz no respeta siquiera el carnet del PSUV, los grupos sindicales terminan en manos de los radicales que protagonizan esta seudo revolución que se jacta de su carácter socialista pero que apresa a los sindicalistas que llaman a paro, y que no quiere dejarle lugar a la disidencia ya no de los llamados opositores, sino que cierran paso a los mismos "camaradas". Cada día los parapetos discursivos del Gobierno encuentran contradicciones abismales en las acciones que emprende, la necesidad de dominar un pueblo que cada día más se despierta del letargo causado por la arremetida asistencial, los lleva a la desesperación total al borde de reprimir cualquier intento de progreso que se vea en la escena política, posibles líderes, buenas gestiones, todo esto que no proviene de sus filas deben ser execrados, eliminados, cualquier vestigio que opaque el papel del comandante incluso dentro de su Gobierno comienza a dejar de cobrar relevancia ya que no interesa que la popularidad del líder máximo merme.
Error Su mayor error político, no trabajar para resolver los problemas reales de la gente; el mayor espacio que han perdido es el del apoyo popular, su derrota más grande la representan las próximas elecciones legislativas.
Frente a ello debemos entender que la lucha no es únicamente mediática, que la lucha la construyen las acciones, que debemos interesarnos por lo público, que debemos ser ciudadanos de acciones y no sólo de votos, que comenzó el proceso de campaña por parte del Presidente y que frente a esto nosotros debemos activarnos. Nuestro rol, como lo plantea el Gobierno para sus militantes, es crucial; las decisiones dependen de nuestra participación, así que el llamado es a impulsar una nueva forma de hacer política. stalingonzalez1980@gmail.com
La criminalización de la protesta es una demostración del talante poco democrático de este Gobierno, los espacios para la denuncia cada día se cierran más, las represalias en contra de aquellos que elevan su voz no respeta siquiera el carnet del PSUV, los grupos sindicales terminan en manos de los radicales que protagonizan esta seudo revolución que se jacta de su carácter socialista pero que apresa a los sindicalistas que llaman a paro, y que no quiere dejarle lugar a la disidencia ya no de los llamados opositores, sino que cierran paso a los mismos "camaradas". Cada día los parapetos discursivos del Gobierno encuentran contradicciones abismales en las acciones que emprende, la necesidad de dominar un pueblo que cada día más se despierta del letargo causado por la arremetida asistencial, los lleva a la desesperación total al borde de reprimir cualquier intento de progreso que se vea en la escena política, posibles líderes, buenas gestiones, todo esto que no proviene de sus filas deben ser execrados, eliminados, cualquier vestigio que opaque el papel del comandante incluso dentro de su Gobierno comienza a dejar de cobrar relevancia ya que no interesa que la popularidad del líder máximo merme.
Error Su mayor error político, no trabajar para resolver los problemas reales de la gente; el mayor espacio que han perdido es el del apoyo popular, su derrota más grande la representan las próximas elecciones legislativas.
Frente a ello debemos entender que la lucha no es únicamente mediática, que la lucha la construyen las acciones, que debemos interesarnos por lo público, que debemos ser ciudadanos de acciones y no sólo de votos, que comenzó el proceso de campaña por parte del Presidente y que frente a esto nosotros debemos activarnos. Nuestro rol, como lo plantea el Gobierno para sus militantes, es crucial; las decisiones dependen de nuestra participación, así que el llamado es a impulsar una nueva forma de hacer política. stalingonzalez1980@gmail.com
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